MI DICCIONARIO


CALMA
La calma llega cuando te paras, cuando dejas de correr, cuando dejas de esperar.
El que no espera nada, está en paz; el que está en paz, no espera nada.

JUICIO
Es un error emitir juicios sin saber, es un error pensar que sabemos sin conocer. Dar por sentado el estado verdadero de una persona por su actitud. Es un error, emitir juicios y prejuzgar sin un conocimiento cabal.

DEFENSA
No es bueno actuar siempre a la defensiva; hay que confiar más en los demás, sobretodo en aquellas personas que te han demostrado siempre su lealtad.

CONFIANZA
La confianza necesita tener abierta alguna puerta. Si tiene que colarse por una rendija, no se puede llamar confianza.

MIEDO
El miedo a veces solo es una figuración del pensamiento. Creemos que nos persigue un tigre y no nos damos cuenta de que corremos solos.

HUÍDA
No se le puede reprochar nada al que huye por sensatez y no por cobardía, aunque a veces es difícil adivinar los verdaderos motivos.

SINCERIDAD
Sincerarse con alguien es un acto de valentía; a veces también, es un acto de desesperación. Puede surgir en los lugares más insospechados.

MODESTIA
La modestia no reconocida como tal puede ser confundida con debilidad y a veces con falta de carácter.

VERDAD
A veces las verdades no son tan importantes. Las verdades son las razones de las circunstancias. La única verdad es que a la verdad no se la puede atrapar.

SILENCIO
El silencio expresa  más cosas que mil palabras pero puede ser usado de muchas formas, como sabiduría o como castigo.

AMISTAD
Si  la amistad es de verdad, no necesita excusas. Como un pozo abierto, siempre está disponible para que bebas de su agua. Como el amor, tampoco se puede imponer.

TIEMPO
Cuando existe incertidumbre, el tiempo no pasa, pesa.


DISTANCIA
Si dan un paso hacia ti y tú te alejas dos, lograrás que no te alcancen. Eso basta para poner distancia, no se necesitan más barreras.

AMOR
Nadie puede obligarse a amar;  tampoco a no hacerlo. Es como tener sueño o no. En cualquier caso, el problema será de quién sufre el insomnio.

GRATITUD
Si no se siente gratitud, seríamos como una piedra tirada en el camino. La piedra es pisoteada pero no aprende; hay que aprender de cada huella aunque sea con dolor y estar agradecido por la enseñanza.

PALABRA
Herramienta de doble filo según de donde provenga. Preferible empuñarla desde el corazón. 

OJOS
Cuando falta la palabra, ellos lo dicen todo. Si ves que han llorado, no te preocupes porque se habrán limpiado y estarán más hermosos.

PAZ
Lo que queda después de la tormenta. Lo que sientes cuando perdonas a los demás y a ti mismo. Lo que habita en ti, cuando comprendes tu lugar y dejas ir.

Namasté.


A.      Aroca

*UN PASO A LA VEZ*


Un paso a la vez, esa es la única manera de caminar; aunque en nuestro
interior tengamos mucha prisa, solo podemos avanzar si ponemos un pie
delante del otro. Puedes aligerar el ritmo, o correr e incluso saltar
con los dos pies juntos pero de esa forma, solo podrás recorrer tu
camino en pequeños trayectos porque tu cuerpo se cansará, empezará a
respirar agitadamente y terminarás parando.


Muchas veces llevamos demasiado prisa y avanzamos más con la mente que
con las piernas, pensando que así vamos a llegar antes, pero de nada
sirve; un paso a la vez, un paso firme y al ritmo de tu propio cuerpo es
más eficaz que uno interrumpido y malogrado por falta de fuerzas.


La vida no es más que una carrera de fondo, y ésto lo dice alguien que
ha vivido siempre de impulsos, inquieta y con mucha prisa por todo para
llegar al final a ninguna parte porque no hay ninguna parte a la que
llegar, salvo a ti mismo.

Disfruta de tu travesía mientras dure, aunque el camino no sea el que a
ti te hubiese gustado, aunque sea abrupto o empinado. Si te mantienes en
ti mismo, comprenderás que lo importante en realidad es tu recorrido.

Cuando se va con mucha prisa, apenas si podemos respirar el aroma de las
flores.


A. Aroca
CRUZAR EL RÍO

Como si estuviésemos en la margen de un río y quisiéramos cruzar 
al otro lado pero tenemos miedo  al agua.
El río es el proceso, lo que existe entre las dos orillas, como lo que
sucede entre dos puntos, o en un lapso determinado de tiempo entre dos
acontecimientos, o la distancia entre dos personas. Muchas son las situaciones
que se ven reflejadas en este ejemplo.
El proceso asusta,  intimida, nos hace  reflexionar y preguntarnos si nos van
 a llegar las fuerzas o nos vamos a ahogar en el intento.  
Solo nosotros sabemos de nuestras debilidades y en el fondo, tenemos miedo de lo que nos
podemos encontrar cuando crucemos, si va a colmar nuestras expectativas tanto esfuerzo
 

Cuando te encuentres en una situación parecida, cuando tengas que cruzar
un río, no pidas que no haya corrientes, ni que se acorte la distancia
entre las orillas, pues cada cosa tiene el límite necesario por su
naturaleza para que sea o se desarrolle como es debido, como tiene que
ser. En su lugar, pide fortaleza y valentía, y cruza; cruza y deja en el
agua tu reflejo cristalino.

Maroka
EL TE ESPERA SIN PRISAS. 

Tengo una cita cada domingo por la mañana a eso de las diez. Voy a
visitar a un amigo que vive cerca de casa y me invita a desayunar un pan
especial, un pan que el mismo prepara y que si bien, no hace milagros,
me quita el hambre de toda la semana. Es como una vitamina que ofrece a
sus amistades, a los que van a visitarlo como yo, y nos reconforta, nos
inmuniza durante siete días y nos ayuda a recobrar la vitalidad del alma.

Al principio, recuerdo que me sentaba al final porque no conocía a
nadie. Escuchaba sin hacer demasiado ruido pues no sabía muy bien que
tenía que decir, ni me conocía sus canciones. Me acercaba tímidamente a
su mesa y apenas levantaba los ojos del suelo cuando me daba a comer de
aquél pan; después de algunas semanas, me sentí con más confianza y
participaba del desayuno como los demás, sintiéndome mucho más cerca de Él.

Él, que me llamó aquél día y me invitó a su casa a la que procuro no
faltar cada domingo; no por costumbre, ni por obligación, sino porque
recargo las pilas para toda la semana de una profunda paz, de una
sensación de bienestar que no puedo explicar ni comparar con ninguna otra.

No iba a misa desde que salí del colegio de monjas, he vivido siempre la
fé muy a mi manera, pero ahora puedo decir que esos cuarenta y cinco
minutos que paso en la iglesia, es el tiempo más feliz y reconfortante
que tengo en la semana.

Me siento muy afortunada y no sé si soy merecedora de tanto privilegio,
por eso, no puedo hacer otra cosa que expresar mi gratitud lanzando
estas palabras al viento, para que ese viento le llegue a todo aquél que
necesite un halo de esperanza, un rayo de luz.

Acércate a su casa, Él te espera sin prisas.

Maroka

Led Zeppelin - Whole Lotta Love






         Escribir es como desnudarse.            
 Desnudarse es despojarse de todo lo que nos tapa, nos oculta; nos quedamos en cueros vivos porque cada palabra dicha es una prenda que te quitas.  Cuando ya no te quedan más capas de las que desprenderte, solo queda la piel, desnuda; carne limpia, vulnerable, rendida, agotada...
Escribir es lo mismo, llega un momento en el  que se terminan las letras, en el que se extinguen las palabras porque ya está todo dicho, ya no queda nada más que expresar, que exponer, que enseñar...  
Puedes pensar que lo has perdido todo pero solo estarás acabado cuando te pierdas a ti mismo. 
Entonces sabrás que ha llegado la hora de callar y de vestirse.                                                                        Maroka
     
Te asomas al escaparate de tu vida y ves como cae la lluvia; ves como las gotas se suceden inmisericorde, penetrando hasta los más recónditos lugares de tu alma y entonces, espiras ese largo aliento sostenido y exhalas a través de un suspiro, todo el veneno acumulado.  
 Ya no importa el tiempo, cruel espejismo, ni la intemperie a la que te has visto expuesta. Solo respiras y dejas que la lluvia resbale por tu piel, en un proceso cabal de auténtica y  purificadora limpieza. 
El autoengaño ha terminado.    

Maroka.  

QUIEN HA VIVIDO MUCHAS TORMENTAS Hay una tierra devastada, destruida por un temporal que el destino caprichoso hace volver una y otra ...