Los vínculos son los nudos que te atan desde el mismo momento
en el que vienes a la vida.
A medida que vas creciendo se hacen más numerosos y diversos.
Unos son obligados, otros elegidos libremente. Muchos por circunstancias y otros
a consecuencia de. Unos son más resistentes, otros fácilmente desgastables con el tiempo.
Algunos te oprimen tanto que quisieras desanudarlos, otros, darías lo que fuera por que
no se soltaran nunca.
Conforme vas creciendo, los vinculos son elegidos con más esmero, tu cuerda se forma
con cuidado dejando espacio entre ellos, sabiendo que lo que se ate te dejará marca, bien en forma de nudo o de recuerdo,
A veces la vida es un poco injusta y forma ataduras tardías o a
destiempo, pero que por alguna razón tuvieron que formar parte de ella.
Hay quién tiene la oportunidad de empezar de nuevo, libre de nudos y de
marcas, como una cuerda recién estrenada; hay quién puede cortar
simplemente la cuerda por donde quiera y también los hay que la
arrastran con todos sus nudos, como una larga cadena.
Recuerdo una frase de alguien que decía que la vida es un contrato a
medias y es cierto, porque desde que naces ya estás vinculado a tu
madre, a tu padre y a tu familia después; a tus amigos, a tus compañeros
de trabajo, a tu jefe, a los vecinos de tu barrio, al camarero que te
sirve todos los días el desayuno, a la joven que te vende el pan...
todos son vínculos, con todos se forman nudos; unos más importantes que
otros, unos más llevaderos que otros, algunos profundos y otros
superficiales, nudos al fin y al cabo que ocupan tu cuerda; todos esos
vínculos con los que tienes que pactar y contratar diariamente tu vida,
porque es verdad que la vida es un contrato a medias ya que ningún nudo
se forma sin que se aten los dos extremos.
A. Aroca
Hay quién tiene la oportunidad de empezar de nuevo, libre de nudos y de
marcas, como una cuerda recién estrenada; hay quién puede cortar
simplemente la cuerda por donde quiera y también los hay que la
arrastran con todos sus nudos, como una larga cadena.
Recuerdo una frase de alguien que decía que la vida es un contrato a
medias y es cierto, porque desde que naces ya estás vinculado a tu
madre, a tu padre y a tu familia después; a tus amigos, a tus compañeros
de trabajo, a tu jefe, a los vecinos de tu barrio, al camarero que te
sirve todos los días el desayuno, a la joven que te vende el pan...
todos son vínculos, con todos se forman nudos; unos más importantes que
otros, unos más llevaderos que otros, algunos profundos y otros
superficiales, nudos al fin y al cabo que ocupan tu cuerda; todos esos
vínculos con los que tienes que pactar y contratar diariamente tu vida,
porque es verdad que la vida es un contrato a medias ya que ningún nudo
se forma sin que se aten los dos extremos.
A. Aroca